

A Ignacio Maestre Casanovas no le cabe la menor duda: el año 2020 fue realmente un año extraño para todo el mundo. Una de las cosas extrañas pero buenas, es que la fauna marina proliferó como hacía mucho tiempo no lo hacía. Vimos delfines y ballenas cerca de la costa de muchos pueblitos de Cataluña; hasta en Barcelona. Seguramente porque los humanos estuvimos confinados en cuarentena por muchos meses y no les molestamos en su habitat natural. Ignacio Maestre Casanovas lo notó también en la abundancia sin precedentes de erizos marinos. Hace un par de años probamos una crema cocida de erizos en Figueras. Pero nunca antes habíamos degustado erizos tan frescos, «regorditos» y sabrosos como los que acabamos de probar Betty y yo en Can Narra.

Al igual que las ostras, los conocedores comen los erizos crudos. Creíamos que tienen un sabor a mar muy fuerte, sabes? así como a yodo…. pero, no. La esposa de Ignasi Maestre Casanovas dice que los erizos del Cap de Creus tienen un delicado sabor a mar.


Estamos en la mejor temporada para degustar los erizos marinos. Aprovéchala!

